El primer llamado terminó con la adjudicación al Consorcio del Lago por G. 73.100 millones, para el tramo dos, y a la empresa Ingaer SA por G. 27.407 millones para el tramo uno.
Sin embargo, tras detectar adulteración de documentos, Contrataciones Públicas ordenó anular la adjudicación a Ingaer. Se trata de la firma que fue fundada por el mismo viceministro de Obras, Leoncio Rojas Molinas, Angel Auad y otros accionistas. Aunque hoy en día Rojas Molinas ya no aparece en los papeles.

En ese sentido, el intendente de San Bernardino, Ramón Zubizarreta, afirmó que no tiene sentido hacer el 70% de la obra y dejarla inconclusa faltando un 30% restante. Por ese motivo, se espera que el MOPC realice esta segunda convocatoria en un proceso transparente y con celeridad.
La ruta Luque-San Ber es impostergable debido al impacto positivo que tendrá en la economía de ambas ciudades y en especial de la capital veraniega, porque potenciará el turismo.
Zubizarreta subrayó que cada año, miles de paraguayos eligen este destino para ir de vacaciones y el año pasado la cantidad de visitantes triplicó. Según lo indicado, a fin de 2011 e inicios de 2012 se registró el ingreso de entre 60.000 y 65.000 personas por fin de semana.

Estos turistas ingresaron a San Ber por un solo acceso y fue un caos, ya que hubo alrededor de 15.000 vehículos que salían o entraban a la ciudad en cinco horas. “Eso es una barbaridad”, exclamó Zubizarreta.
Según la versión de Obras Públicas, en un mes se tendrá la nueva adjudicación; sin embargo, las autoridades de Luque consideran que ese tiempo es irreal, ya que en el primer llamado se utilizaron alrededor de cinco meses.
Incluso, en la ciudad de Luque se llegó a realizar protestas en contra del MOPC, ya que en lugar de adjudicar a la siguiente oferta en el tramo uno de la obra, decidió declarar desierto el llamado.
Es que varias obras que afectan a esta ciudad están varadas en la cartera de Estado, como por ejemplo, la autopista Ñu Guasu, a ser financiada por Focem.
Esta obra tiene problemas, según admiten en MOPC, debido a que el precio adjudicado para ejecutar la obra supera ampliamente el presupuesto presentado inicialmente ante el organismo internacional.

Viceministro dice que no es parte de Ingaer

Haciendo uso de su derecho a réplica, el viceministro de Obras Públicas, Leoncio Rojas Molinas, envió a nuestro diario una nota en la cual asegura que no tiene vinculación personal ni profesional con la empresa Ingaer. Fue tras la publicación de fecha 19 de mayo que hacía referencia a la licitación de la obra Luque-San Ber y la protesta realizada por ciudadanos y autoridades luqueños.

En el artículo, el presidente de la Junta Municipal criticó la suspensión del tramo uno de la licitación y alegó que eso se debió a que Rojas Molinas “a toda costa está queriendo beneficiar a su empresa”.

En respuesta a esta declaración, el viceministro señaló: “No soy accionista de la empresa Ingaer SA, ni me encuentro vinculado con ella en forma personal o profesional, como se podrá corroborar con el certificado expedido en fecha 22 de mayo del año en curso, cuya copia autenticada se adjunta”.

El certificado de referencia es una nota autenticada en la que el presidente del directorio de Ingaer SA, Ángel Auad, deja constancia de que Leoncio Rojas Molinas, con CI número 182.299, “fue accionista de Ingaer SA hasta el día dos de febrero del año dos mil seis, fecha en que transfirió la totalidad de sus acciones a favor de terceros”.