Comuna luqueña alquila ilegalmente un espacio público

Las principales avenidas y calles de esta localidad fueron cediendo terreno a los anuncios publicitarios, que en forma desordenada se multiplican a lo largo de la ciudad. Existen varias ordenanzas,  como por ejemplo la N° 35/2002,  que reglamenta toda esta actividad,  pero no se cumple en lo más mínimo.

Los anuncios publicitarios están distribuidos  sobre las veredas, paseos centrales e incluso algunos sobresalen peligrosamente sobre la calzada. En algunos puntos constituyen verdaderos obstáculos para el peatón, mientras que otros interfieren en las señales de tránsito.

El caso más llamativo fue la colocación de un enorme cartel publicitario de un local de venta de comida rápida, propiedad de Carlos Soberino,  que cruza una de las arterias de la avenida Nanawa del barrio Palma Loma.  Fue instalado de manera irregular, sin la autorización municipal. Pero el propietario antes que ser sancionado consiguió sugestivamente arrendar el espacio por un año, por el  cual abonó G. 4.000.000.

Tras la denuncia de los vecinos, el pasado 29 de enero Meza Bría había  confirmado  la instalación irregular y aseguró que  el propietario sería sancionado, pero tras darle el seguimiento constatamos que el cartel continúa en el sitio. Además, el expediente llamativamente nunca llegó al Juzgado de Faltas.